La Gran Historia de la Filosofía Occidental
Largometraje animado.
Directora: Aria Covamonas
La película se divide en tres partes, cada una con una duración de 22 a 30
minutos, situadas respectivamente en Grecia antigua, en un Western (o película
estadounidense sobre el viejo oeste) y en una ópera de ciencia ficción; conectadas
por un meta-argumento en el que el Comité Central de la República del Pueblo
produce la película, basada en una idea del presidente Mao Tse-tung.
Este proyecto de película está fundamentado en su método (que sustituye aquí la función
del guion y que ha sido descrito en su lugar), el cual intenta ser una imaginativa emulación de la
mente subconsciente humana como es entendida por el psiquiatra y psicoanalista Jaques Lacan.
Lacan, siguiendo la tradición filosófica idealista en una línea que va preeminentemente de Platón
a Kant y de Hegel a Wittgenstein, considera que los seres humanos no experimentamos el mundo
real, sino que vivimos en una realidad pensada por medio del lenguaje. Sin embargo, de manera
contraintuitiva, los elementos de nuestro lenguaje (significantes) no se refieren a objetos en el
mundo real (significados), sino solamente a otros elementos lingüísticos: una palabra no se refiere
a una cosa, sino solamente a otras palabras, que se refieren a otras palabras, que se refieren a otras
palabras… poniendo en marcha la realidad exclusivamente humana. Así como podríamos pensar
que el Sol gira alrededor de la Tierra porque eso es lo que parece, podríamos creer que eso a lo
que nos referimos cuando decimos Yo, es el centro de nuestra experiencia. Sin embargo, este Yo
no es sino una instancia cuya función es establecer relaciones con el mundo exterior, mientras que
el subconsciente es la máquina impulsada por y, al mismo tiempo, el generador de la cadena.
Sabemos de la existencia del subconsciente gracias algunos fenómenos residuales producto de su
actividad: los sueños, el chiste, el olvido o sustitución errónea de palabras, los síntomas neuróticos.
Nuestra película se puede considerar, del lado del espectador, un residuo del método planteado en
lugar del guion, y será extraña (los sueños), hilarante (el chiste), confusa (olvido y
error) y angustiante (síntoma). Este proyecto, y el trabajo de animación que he
realizado hasta ahora se construye como una máquina impulsada por esa cadena
significante, con la esperanza de que me permita ver o
siquiera vislumbrar un pedacito de significado auténtico y profundo y
que genere preguntas y sugestiones en el espectador, apelándo a sus recónditas
emociones y a su lado irracional.
––¿Qué importancia tiene la producción de este tipo de obras extrañas y herméticas que se
muestran indiferentes a si son, o no, comprendidas y que se rehúsan a entablar una conversación
con los eventos de su tiempo y cultura, prefiriendo tomar sus influencias y referencias del pasado
universal o simplemente contemplarse a sí mismas?
Es mi profunda convicción que su existencia es crucial. Es innegable la importancia y la
necesidad de películas y cualesquiera otras obras artísticas que traten los problemas de nuestra
época y nuestra cultura, que son muchos y muy urgentes. Que den voz a quienes viven en los
márgenes de la sociedad, o que simplemente enriquezcan el repertorio de estudios de la condición
humana (soy una mujer transgénero, feminista, autista, vegana y socialista, de lo que se puede
inferir la lista de los temas que me son más cercanos y dolorosos). Pero hay también otro tipo de
problemas fundamentales (problemas de sentido, de significado, del modo en que enfocamos y
compartimos esta construcción exclusivamente humana que es la realidad), a los que no es posible
aproximarse más que dando vueltas alrededor de cuestiones primordiales irresolubles para
nuestras mentes humanas con las limitaciones del lenguaje (literario, cinematográfico y musical).
¿No parecen Lautreamont, Roussell y Jarry (tres vidas breves e inconsecuentes) con sus obras
extrañisimas, rebuscadas y absurdas, prefigurar el fin de la Modernidad en el siglo XX (además
de haber influido en todas las vanguardias del mismo siglo)?
Han sido necesarios en cualquier época estos registros de luchas íntimas imaginarias, estos
descensos órficos al infierno, estos viajes redondos al reino de los sueños. El fomento y la
preservación de estas rarezas es del más alto interés público, y además ya sabemos qué
clase de sociedades se esfuerzan en lo contrario, en marginalizar y aniquilar lo
inusual, lo incomprensible (¡Los nazis! Me estoy refiriendo a los nazis y su
designación de Arte Degenerado).
Reivindico en este sentido la importancia de la experimentación como camino de
libertad y emancipación, como posibilidad para el cine mexicano de proponer
imágenes que nos ayuden a explorar el mundo que habitamos sin renunciar a la
ironía, el juego y las posibilidades técnicas de la animación.
Esta película retoma la tradición de las vanguardias, desde la libertad de montaje de Eisenstein
hasta el flujo de conciencia de James Joyce, desde el collage dadaísta hasta los procedimientos
seriales de Arnold de Schönberg, recombinando de forma irreverente estas influencias. Mi trabajo
tiene también claras influencias del artista checo Jan Švankmajer. Las principales obras de dicho
autor que pueden vislumbrarse en La Gran Historia de la Filosofía Occidental son sus películas
Alice y Fausto tanto por sus innovaciones en el género de la animación experimental así como en
sus múltiples niveles de narración. En segundo lugar pueden hallarse puntos de encuentro en las
hilarantes animaciones de Monty Python, específicamente en la película Monty Python and the
Holy Grail, por su tono bufonesco, así como las surreales animaciones del cineasta Terry
Gilliam.
Esta máquina funciona, si nos permitimos simplificarla aún más, a la
manera de un juego formal (música y poesía podrían considerarse
similares): establezco mi campo de juego, que es el encuadre
cinematográfico con sus posibilidades audiovisuales, y sobre éste
puedo hacer lo que sea siempre y cuando me atenga estrictamente
a un sistema de reglas arbitrarias básicas.
a) La narrativa es causal; aunque sea imaginaria, rebuscada, incluya elementos
fantásticos, siga una lógica onírica, siempre correrá sobre la vía de causa y efecto. El
absurdo por sí mismo no está permitido.
b) La imagen se crea mediante la técnica de animación cut-out a partir de fotografías e
ilustraciones antiguas que pertenecen al dominio público; estas van a ser tomadas de
acervos proporcionados principalmente por bibliotecas y museos a través de sus sitios en
Internet (está explicitada por parte de dichas instituciones su estatus de libre de derechos).
El estilo visual está inspirado por la misma fuente de la que me apropié la técnica: el Club
Dadá Berlín (de manera especial Hannah Höch, quien es mi madre espiritual), un
movimiento antiartístico de entreguerras que se expresó de manera notable por medio del
fotomontaje.
c) El audio va a ser compuesto a partir de fragmentos sonoros (de modo análogo al cut-
out visual) extraídos de películas en el dominio público, principalmente las producidas en
China y publicadas hace más de 50 años (anteriores a 1970), para así haber entrado al
dominio público según la ley China e internacional. Los diálogos en mandarín se van a
subtitular en castellano métrico (octosílabos principal, pero no exclusivamente) de
composición original y que no van a corresponder con el contenido del audio; también se
van a extraer sonidos ambientales y música de B-Movies estadounidenses anteriores a
1978, que entraron en dominio público por no indicar su copyright o no haberlo renovado.
d) La animación se va componiendo en pequeñas unidades de 2 segundos, que son
segmentos terminados en todos sus elementos audiovisuales y textuales. Cada unidad va
a funcionar como un pie en métrica hispana, limitando y orientando las posibilidades
argumentales y los movimientos animados que están restringidos por las elecciones
disponibles de recortes fotográficos y sonoros.
